¡Adiós magazo!
Siempre con buen humor, bonachón, e ingenioso, Don Beto el Boticario era como un miembro de nuestra familia; un "tío" jovial que nos visitaba una vez por semana. Dueño de un humor exepcional. Era también un actor muy completo; sabía improvisar, sabía el "timing " del humor, y apoyaba muy bien a los actores principales comprendiendo que el era "secundario" -o de apoyo-;o beneficiando a la historía, en vez de buscar el lucimiento personal. Gran actor, muy natural, contenido pero que transmitía mucho; además de resultar siempre simpático; no en valde ganó un Ariel.
Punto y aparte merece su faceta como "mago" comediante. Sus trúcos -"experimentos", como el los llamaba- eran abstractos,delirantes, y accidentados -pero nunca desafortunados-; ese es un estílo que el mismo cultivó, basado un su fínisimo humor y personalidad tan especial. Al fínal no importaba el truco o su resultado, Beto ya había puesto en marcha la magía del humor; daba igual si nos daba gato por liebre, o si se había burlado un poco de nosotros, y de nuestra credulidad -de andar creyendo en magía y en magos-.
La humildad de este genío, y su despreoupada anti-solemnidad, a veces ocacionaba que fuera subestimado por muchos; pero conocer su trabajo y reconocer su estílo era garantía de diversión para todos.
Descanse en paz.
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