"Me esnifé mi Porsche y mi avión. Todo fue para drogas y alcohol", dijo el cantante de 63 años, que en 1983 casi cae en bancarrota.
Según declaró al diario, antes tenía siempre en el escenario una taza llena de cocaína, que escondía en uno de los tambores de la batería.
Tyler goza ahora de una renovada popularidad-y de un nuevo tipo de público- tras su participación en un reality show donde es juez de un concurso de talento.
P.D: Taza de cocaina eh? Y nosotros que nos conformábamos con el rumor de que en sus pañuelitos guardaba el pase. Como siempre, las suposiciones quedan en nada.
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