En tiempos donde hasta Poison han tenido su oportunidad de ¨regresar¨ -a los escenarios, a las estanterías de las tiendas de discos, y a la ¨vida pública¨-; y donde gracías a un toque de sentido y justicia en este mundo tan loco, bandas como AC/DC, Metallica o Mötley Crüe vuelven a reinar, yo hecho de menos la presencia de unos W.A.S.P. -que a pesar de seguir en activo , aguantando como los machos metálicos- si se extrañan las hordas de Blackie Lawless más desbocados y teatrales.
Una seríe de discos irregulares, y una perdida de su impetú más sangriento, filoso y de shock , redujeron a esta importante banda en una simple referencía para rockers especializados, o gente nostalgica; en un ejemplo de dinosaurios rockeros de otras epócas. Es una pena; por que se hecha en falta la explosividad y el desparpajo de los que hicieran gala estos locos del Hard y Heavy Rock salpicado de Shock y Glam.
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