Lo peor de los tiranillos de acá, es que no tienen huevos, tiran la piedra y esconden la mano. Son solo burócratas "huele pedos" venidos a más. Cuando les conviene "se hacen chiquitos" y ponen caras de "yo no fui".
En cuanto se trata de dar la cara frente a determinados hechos internacionales, la tímida respuesta de los mecanismos de política exterior de este gobierno deja al descubierto que para ellos es tan solo una oficina más; otra caja chica, otra excusa para hacer negocios. Así, cuando el Estado por medio de sus organismos consulares debiera mostrar una postura, muestran una posturita un poquito "pasiva": se ponen de a cañón y se quedan mudos. Ya casi por inercia de burócrata que teme "regar el tepache" otra vez, mejor agachan la cabezita un poco, y se quedan silbando tan campantes; a que pase el tiempo, o pase algo. Queda un poco claro que esta "administración" prefiere no tener roces que repercutan en sus intereses comerciales;ahi si les duele en lo más hondo y -por fín-reaccionan:cuando les pegan en sus negocitos.
Y cuando te descuidas, sabedor de que ahí hay un "cochinero", regresan y se comportan como directores de primaria marista, gritando ordenes inconexas.
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