lunes, 4 de mayo de 2009

Discriminación y estigmatización.

A raiz de la alerta mundíal por la ¨omnipresente¨ influenza A/H1N1 cientos de países mostraron rechazo a los mexicanos que se ¨atrevían¨a salir del ¨país infectado¨y llegar a sus ¨higienicos¨ y ¨sanos¨ países. Tal es el caso del gobierno chino -tan limpios ellos- y sus medidas siempre totalitarias y abusivas; los chilenos, que de inmediato pusieron su mejor cara de fuchi; y los argentinos, siempre tán ¨higienicos y correctos¨, por no hablar de su comprensión, y de sus muestras de simpatía para todo el resto de América látina (Not!-ironía).

Reacciones todas exageradas, sín bases cientificas, discriminatorias, y hasta racistas.

Pero ya ven; la culpa sín duda la tenemos los mexicanos por lambizcones; y por andar siempre tratando bién a todo extranjero, casi poniendonos de alfombra, mientras en otros paises no pagan con la misma moneda.

El caso del gobierno chino, lleva bastante carga de cinismo; recordemos que este gobierno ocultó al resto del mundo la pandemía de la llamada influenza o gripa aviar que padecian, hasta que fue imposible seguir ocultando la información; y mientras tanto cientos de chinos entraban y salían de su territorio, y muchos de ellos vinieron a parar a México. Y ahora si, muy comprensivos ellos. Lo que deberiamos hacer es dejar de comprar sus cochinadas y baratijas, que esas si son una pandemía.

Los chilenos siempre haciendo escándalo, al parecer para que alguién los pele; con su presidenta y sus acciones políticas con tintes de señora histeríca. ¿Que tal si a cambio boicotiamos sus productos?, no más vinitos chilenos -ahora a tomar vino mexicano aunque sepan bién pinches acídos-, ni uchuvas en almíbar. No es que alguna vez los chilenos se hayan dignado a declararse muy amigos de México, a pesar de que durante la dictadura de Pinochet y sus pinochos, México recibío refugiados políticos a granel, siempre con los brazos abiertos. Bueno, eso si, Don Francisco queda libre de toda culpa, y los mexicanos seguiremos viendo los maratones de Sábado Gigante sín empacho; y como Jodorowsky se declara ciudadano del mundo -y si por el fuera, sería casí patrimonio de la humanidad- tampoco con el hay bronca; pero el resto, que ya no esperen que aguantemos sus berrinches y su hipocresía casi provinciana.


¿Y los argentinos? Solo decir: tal vez es buén momento para plantearse una ¨purga¨ de argentinos en México, como respuesta a sus políticas siempre mamonas y sus actitudes de ¨mi caca no huele por que soy argentino¨. Adiós a los cientos de chés que invaden nuestras calles en busca de empleos. Deportarlos -dado que la mayoría esta en situación de ilegales en nuestro país-. Claro, todo justificado, bajo la excusa de que los podemos infectar. Imaginen la Condesa sin argentinuchos pagados de si mismos; ya no más ches, hablando como Raúl Astor, acerca del último mundial de fútbol que ganaron , y del por que ellos si son inteligentes y perfectos; y tratando al mexicano con la punta del píe. Sería por lo menos refrescante.

Abur.

No hay comentarios: