Cosas de Coachella: Rihanna la chica buena que se “volvió
mala” y el Holograma de Tupac.
Coachella ya no es solo un festival musical; ahora es el
campo de juegos de estrellas de toda índole, en donde dan a conocer que “ahí
están” y se la están pasando bien, la plataforma donde “suceden las cosas”, el
nuevo estilo de promocionar algo.
La gente que pudo ir a Coachella-festival de 3 días que se
celebra en la ciudad de Indio, localidad desértica californiana en el valle de
Coachella- fueron testigos de muchas cosas: no solo fue bombardeada con horas de
música a cargo de gente como Radiohead,The Strokes, Kayne West, Arcade Fire,
Kings of Leon, Crystal Castles,The New Pornographers, Interpol o los Black
Keys; si no que además de pasear su “pose” festivalera y ver otras poses,
también pudo contemplar “milagros” tecnológicos como el -tan comentado-
holograma del Tupac. El malogrado rapero “cobró vida” en forma holográfica para
manifestarse en el escenario y “rapear” al lado de. Dr. Dre y Snoop Dog.
¿Morboso? ¿Irrespetuoso? No en este mundo del espectáculo, en donde todo vale
para impactar. Ya antes habíamos visto en los escenarios hologramas de Elvis,
de Freddie Mercury o de Frank Sinatra “interactuando” con músicos; pero este
holograma de Tupac inaugura una nueva era de música y tecnología de proyección.
Tupac no fue el único invitado a esta fiesta, se reunieron con los MC´s gente
de la talla de 50 cents,Eminem y Kendric Lamar. Sin duda estos colmilludos
raperos-Dr. Dre y Snoop- confirmaron que la música pop en E.U. gravita
alrededor de la cultura hip-hop.
Y bueno, lo de Rihanna entra más en la categoría chisme del espectáculo
tipo Pati Chapoy, en donde podemos practicar cara de sorpresa ante algo que ya
medio mundo sabía: que a la nena le gusta la fiesta. Lo divertido es ver como
la chica de barbados montaba su cotorreo con sus amiguitos estrellas del pop en
pleno Coachella, y como paulatinamente se iba “descarando”. Primero poniéndose
a tono con un churro, para ver el holograma de Tupac “como se debe”; y luego de
plano agarrando la cabeza rapada de su guarura como charola para esnifar
cocaína-cabe aclara que ella estaba posicionada sobre los hombros de dicho
guarura, para no perder detalle del show-. En fin, así se pone el ambiente en
uno de los festivales más emblemáticos de E.U.
Por cierto, nuestros mexicanisimos Caifanes tocaron en
Coachella y al parecer les fue bien, y dicen los que estuvieron ahí que sonó
mucho mejor que el sonido que tuvieron en el Vive Latino. Y con muy buen apoyo
del público mexicano que ahí se congrego para escuchar a esta banda emblemática.
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