viernes, 26 de noviembre de 2010

Un capo más.

Desafiante marcha con su comitiva armada y nerviosa, presto a inaugurar alguna nueva idiotez. Dentro de sus casas la gente observa con desconfianza el desfile de autos blindados, las groseras ametralladoras calibre 50 apuntando hacía ellos. "Es la guerra" les han dicho hasta la saciedad. Arriba del vehículo cuasi-militar, -el- parece posar para alguna cámara oculta, con la mirada vidriosa y el gesto anodino, sintiéndose justificado, "empoderado"-"haiga sido como haiga sido", ¡chinga!-. Un capo más; este pagado por nosotros.

No hay comentarios: